20 de octubre de 2016

Flor de pesto de calabacín




Estoy muy contenta con la excelente recepción que ha tenido la nueva página del blog: ¿Qué os recomiendo si... (la podéis ver ahí arriba, entre el índice de recetas y el "Sobre mí"). Lo anuncié en Facebook y tuvo muchísimo éxito, pero lo repito en la entrada de hoy para los que no tenéis Facebook. ¡Espero que os guste!

La receta de hoy es... ¡¡salada!! Hasta ahora sólo había una receta salada en el blog, las galletitas saladas de sésamo y parmesano. La entrada es del 2013, en los primeros meses del blog, y la foto es bastante mala... debería repetirla. Aún así, a pesar de la foto, son unas galletas que hago con bastante frecuencia porque me parecen deliciosas. Ya sabéis que soy más de salado que de dulce, aunque parezca extraño dicho aquí! Esas galletas con una copa de vino son un ejemplo de que la vida está llena de placeres sencillos.

Hoy os traigo una receta más elaborada que encontré en una revista de Betty Bossi (tengo pendiente una entrada para explicaros quién es Betty Bossi!). La hice este verano cuando estaba de vacaciones en Alicante para llevarla a una barbacoa organizada por mi amiga Michelle. No tenía ningún artilugio, moldes y demás, pero rebuscando entre mis recetas pendientes de hacer, encontré ésta, que es la prueba de que se puede hacer algo muy llamativo sin tener utensilios sofisticados. ¡Sólo hace falta un poco de maña! El pesto también es facilísimo de hacer, y el resultado final es muy sabroso a pesar de las tres capas de pizza. ¡Recomendado al 100%!


Consejos:

> Por supuesto, si sois vagos podéis comprar pesto en vez de hacerlo, pero caeréis en mi estima.
> No le tengáis miedo a la confección de la flor... Cuando más fría esté la masa, más fácil será, pero yo lo hice en Alicante en pleno mes de agosto y salió bien!

Ingredientes:

- 80 g de tiras de beicon
- 1 cebolla chalota - picada
- 1 diente de ajo
- 200 g de calabacín (1 calabacín pequeño)
- unos 150g de albahaca fresca
- 1 cucharadita de sal
- 50 g de queso parmesán
- 3 cucharadas de aceite de oliva
- 3 masas redondas de pizza fina
- 1 huevo batido


Elaboración:

Rehogar las tiras de beicon en una sartén sin aceite. Cuando estén tostaditas, reservar en un bol.

En la misma sartén, calentar un poco de aceite de oliva. Rehogar la chalota, el diente de ajo y el calabacín en rodajas durante unos 5min. Dejar enfriar un poquito y poner en un bol o jarra medidora. Añadir la albahaca, la sal, el aceite de oliva y el queso. Triturar y dejar enfriar.

Empezamos con el montaje.
Poner una de las masas de pizza sobre la placa del horno y extender la mitad del pesto por encima:




Esparcir por encima las tiras de beicon:




Colocar encima otra de las masas de pizza y presionar:




Extender la otra mitad del pesto:



Y la tercera masa de pizza (presionando un poco)! Reservar media hora en la nevera.




Al cabo de media hora, precalentar el horno a 200º mientras hacemos la flor.
Con un buen cuchillo, cortar en cuatro dejando un círculo en el centro:




 Y a continuación cada cuarto por la mitad otra vez:




Y otra vez hasta que la masa esté dividida en dieciséis partes iguales:




De dos en dos, coger dos tiras y girar la de la mano derecha hacia la derecha y la de la mano izquierda hacia la izquierda:




A continuación, repetir el mismo gesto con las mismas tiras, de dos en dos, y cerrar las puntas exteriores hacia abajo para formar la flor.




Pintar con un pincel con el huevo batido y decorar el centro con calabacín en rodajas:




Hornear unos 35-40min. Es importante que la parte inferior esté bien hecha:




Dejar enfriar sobre una rejilla.

¡Servir y disfrutar!






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